El colectivo del taxi emite su propia moneda

Paro un taxi en el aeropuerto y aviso al conductor que estoy preparando un reportaje sobre la nueva moneda que han sacado.

"La idea es evitar que atraquen a los compañeros", me comenta un taxista mientras tapa con la mano la licencia que lleva pegada al salpicadero. "Con esto de la crisis han vuelto a aumentar los robos a los profesionales del volante, y eso no puede ser".

"Introduciendo esta nueva moneda en el circuito del taxi haremos que el robo ya no tenga sentido; aunque siempre quedarán los drogadictos que vienen a por el radiocassette o a levantarte el navegador".

Ante la pregunta de cómo surgió esta iniciativa, responde que "habíamos unos cuantos en la parada de taxis de la T1 del aeropuerto, un día de estos que no había mucho movimiento, y mientras íbamos empujando los coches hacia la cabecera de la fila para ahorrar gasolina, que no sabes cómo está el panorama, que a ver cuándo echan a éste pelele que tenemos de presidente y vienen los que tienen que venir para arreglar el país... bueno pues como te iba diciendo, alguien dijo que con las pesetas vivíamos mejor; otro, que si el dinero es de quien se lo trabaja; aquél que si le habían robado ya no se cuántas veces, y como una cosa lleva a la otra, pues inventamos lo de la Taseta."

Aunque el Gobierno no apoya esta iniciativa, el colectivo ha tirado adelante su proyecto y ya ha empezado a circular su moneda alternativa. "Para no complicarse la vida, y tú ya verás por donde voy, 30 euros equivalen a 5.000 tasetas y 6 euros a 1.000 tasetas ¿lo pillas, no?", me dice mientras pita y se pega a la rueda de un ciclista que va delante nuestro.

A la pregunta de cómo están realizando el despliegue de esta moneda y dónde se puede adquirir, se rasca la cabeza y se gira por completo hacia mí, mientras pasamos a toda velocidad por una zona escolar: "verás, eso ya lo estuvimos comentando en el gremio y lo que hemos acordado es ir cobrando en euros e ir devolviendo el cambio en tasetas; si un compañero no tiene suficientes tasetas o moneda fraccionaria de la misma, se le hace un tique con el firme compromiso de descontarlo del próximo servicio. Aquí lo que queremos es total transparencia".

Ya hemos llegado. Le doy un billete de 50 euros, me pone mala cara y me da un billete de 1.000 y otro de 2.000 tasetas, con las caras de Justo Molinero y El Fary, respectivamente.

Subo a la redacción para contrastar la noticia con una de las principales cooperativas del taxi, pero cada vez que pregunto en centralita por alguien del gabinete de prensa me envían un vehículo a la puerta.